Enfrento por fin la posibilidad.
Es ahora. Siempre ha sido ahora.
Trincarme los zapatos y salir.
Se empina la piel de estos pies tan fríos, de pantillas de cordero y paja.
No hay escamas. Mis zapatos trépano apuntan. Amontonan destrezas, recelan quemaduras y nuevas venturas.
Avanzan.
Ya.
Es momento.
Escupen el camino,
el que sobra, el que salpica, el que enchastra.
Desechan, desplazan, pisan, profanan.
Un árbol molesta, ya no.
Avanzo.
Un caracol se repliega, no lo veo más.
Trepanan. Rompen.
Domino.
Un niño de granito se repliega, lo dejo elicoidal, filoso, frío.
Aplanan, fisuran, consumen, corroen, vencen, arrasan.
Avanzo.
¿Hacia dónde? ¿para qué?
Trepano.
jueves, junio 19, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario